miércoles, 16 de agosto de 2017

Un viejo conocido


"Un viejo conocido volverá a tu vida."

Así decía la profecía que encontró dentro de su galleta de la suerte después de la cena. La mayoría de las personas hubiese continuado con su vida sin darle importancia, pero ella no era como la mayoría de las personas. Durante años ha visitado adivinos y videntes, gitanas que leen la mano, brujas que leen el café y en general todo ese tipo de personas que claman tener algún don y al final han resultado ser meros charlatanes.

Pero ella sabe que hay algo más allá afuera, simplemente lo sabe y por ello cree ciegamente en lo paranormal, en lo extrasensorial y hasta en las supersticiones.

Por eso al recibir la noticia de que "un viejo conocido volvería a su vida", en lugar de pensar que era una tontería o una predicción al azar, inmediatamente se empezó a preguntar quien sería.

Durante el trayecto a casa estuvo pensando en el asunto, después de todo, volver a entablar vínculos con alguien del pasado no es algo que suceda todos los días.

Pensó en su padre, que un día hace más de 15 años salió a comprar cigarros y nunca regresó. Hace tiempo se enteró que él se había fugado con una mujer más joven incluso que ella misma. pero igual podría ser él ¿No? 

¿Qué le diría? 
¿Cómo reaccionaría? 
¿Qué buscaría después de todos estos años lejos?

Todas esas preguntas sin respuesta, que se había hecho ya varias veces antes, volvieron a ocupar su mente. 

Tan ensimismada se encontraba que no se había percatado de que estaba parada frente a su puerta sin siquiera buscar las llaves para abrir. Se imaginó la escena vista desde lejos y se sintió tonta. No era probable que nadie paseara por la calle a estas horas de la noche, sin embargo, eso no le quitó la sensación de torpeza, Decidió zanjar el asunto de una buena vez y no volverse a preocupar por él hasta que el viejo conocido hiciera su aparición.

Lamentablemente su subconsciente no se dio por enterado de su decisión y mando una terrible señal de alerta mientras ella cepillaba sus dientes: Podría ser él. Su ex. De inmediato sintió como si la hubiese golpeado un rayo y nuevamente se vio a si misma congelada frente al espejo, en pijama, con el cepillo de dientes inmóvil en la boca y sus ojos totalmente abiertos.

Tenía lógica, todo embonaba perfectamente. Se enteró que su ex había terminado con su nueva novia hace poco, luego varios amigos en común le contaron que él había estado preguntando insistentemente por ella y ahora recibe el aviso que un viejo conocido volvería a su vida. Definitivamente tenía que ser él. Al parecer el ritual de amor que había hecho la última luna llena funcionó.

Por extraño que parezca se sentía más tranquila al llegar a esa conclusión, ya que había imaginado en su mente muchas veces cómo sería cuando su ex volviera y estaba bien preparada para ese momento. Sabía que al final lo perdonaría, por supuesto, pero antes lo iba a hacer sufrir por atreverse a dejarla por otra.

Finalmente ya tranquila apagó la luz y posó su cabeza sobre la almohada dispuesta a dormir. Entre su somnolencia se preguntaba cuándo sería el día que volvería, si quizás sería mañana mismo o si tendría que llevar su más lindo atuendo.

De pronto reparó en el ruido bajo su cama, como si uñas hubiesen rasgado contra el piso y algo se hubiese arrastrado, reptando por salir. Sus ojos se abrieron de golpe de par en par, su respiración se agitó y empezó a sudar frió. Aguzó el oído para ver si lo escuchaba de nuevo, pero después de un rato seguía sin escuchar nada, solo escuchaba su pesada respiración. O eso creyó, hasta el momento que notó que la respiración que escuchaba no era la suya, sino que venia de bajo la cama.

Años de recuerdos reprimidos se abrieron paso de golpe a su mente consciente. Empezó a temblar incontrolablemente como tantas veces había hecho de niña. Intuitivamente se recorrió y termino sentada balanceándose sobre su almohada, con sus piernas abrasadas y repitiendo entre sollozos:
NO. 
Él No, por favor. 
Él no...